La galería Ármaga cierra el año con una gran exposición del asturiano Pelayo Ortega, uno de los pintores españoles con mayor proyección internacional y un artista vinculado a esta sala leonesa desde hace muchos años (su última exposición aquí tuvo lugar en 2013). La inauguración-vermouth tendrá lugar el sábado 10 de diciembre, a las 13 horas, y la exposición se podrá visitar hasta el 10 de enero de 2017.
Pelayo Ortega (Mieres, Asturias, 1956) reside y trabaja en Gijón. En esta ciudad estudió dibujo, pintura y grabado, en la Agrupación de Bellas Artes, y continuó su formación en la Escuela de Artes y Oficios de Oviedo y en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, ciudad en la que vivió entre 1975 y 1990. En su trayectoria fue importante también su paso por el taller de grabado de Dimitri Papageorgiu y su aprendizaje como copista en el Museo del Prado.
Reflexivo, simbólico, elocuente, nostálgico… Pelayo Ortega es un pintor de instantes y de vida que juega con los colores, pero también con la figura y la ironía. Para el crítico Guillermo Solana, en su pintura ha cultivado “una poética de la claridad”. Otro crítico que ha definido y defendido su obra es Juan Manuel Bonet, quien habla de una “pintura esencial”, de una pintura depurada hasta el extremo en sus colores y en sus construcciones.
Con 21 años, en 1977, Pelayo Ortega realizó su primera exposición individual en la Galería Atalaya, en Gijón. Desde entonces, en su extensa trayectoria figuran importantes becas y destacados premios de pintura. En 1998 firmó un contrato con una de las más importantes galerías del mundo, Marlborough, lo que le ha llevado a exponer en las salas de los diferentes países donde esta galería tiene presencia (Madrid, Nueva York y Mónaco). Gracias a ello, su pintura ha podido ser conocida y apreciada por grandes coleccionistas, así como comentada por los más reconocidos críticos.
Sobre él ha escrito Amalia García Rubí: “El lenguaje neofigurativo de Pelayo Ortega, un artista cuya carrera se ha hecho fuerte en España en las últimas décadas, ha evolucionado hacia una considerable simplificación de las formas y un lenguaje más directo que, sin abandonar el sentido metafórico y poético de sus imágenes, reduce éstas a una concreción semántica sin precedentes. Al mismo tiempo, el empleo de colores puros, la concepción matérica del pigmento y el sentido plástico del cuadro dan a la obra de Pelayo Ortega sus principales signos de identidad. (…) En las imágenes vibrantes y sencillas de este gran pintor subyacen breves versos entrecortados de donde asoman sensaciones y recuerdos casi siempre vinculados al lugar, a la tierra”.
Además de pintor, Pelayo Ortega es también ilustrador y grabador, y como tal ha colaborado en libros como La Indumentaria Popular de Asturias, de Luis Argüelles, y Semblanza de Gijón, de Francisco Carantoña (con este último trabajo ganó el Primer Premio Nacional de Edición, modalidad Bibliofilia). También ha realizado montaje de exposiciones, diseño de catálogos, y cartelería para el Festival Internacional de Cine de Gijón y para la Feria Internacional de Muestras de Asturias.
Comentarios recientes