ll Concurso de pintura rápida. León
24 de junio de 2018 a partir de las 8:30 horas
Diputación de León. Pza San Marcelo
Cuando llega la primavera, nuestro país cambia. Cambia el paisaje y las ciudades. El sol –nuestra insignia por excelencia- cambia los tonos de los edificios y se cuela por todas las callejuelas, nadie escapa al encanto que provoca pasear por las localidades españolas con las piedras teñidas de dorado, el cielo de un azul resplandeciente y los parques y lagos de un abanico de colores inabarcable.
En este marco sensorial, no es difícil entender la proliferación de los concursos de pintura rápida por todo el país. Muchos artistas cogen el coche y recorren gran parte de nuestras carreteras atraídos por la pintura, disfrutar del buen tiempo, y por supuesto, suculentos premios. Cada vez son más quienes se adentran en este mundo y quedan atrapados por el reto que supone capturar la esencia de una localidad en unas pinceladas. El modus operandi es muy sencillo; los participantes llegan, eligen el lugar a retratar es imprescindible pintar al natural, sin ayuda de fotografías, sellan los bastidores y pincel en mano; tres, dos, uno, comienza el concurso; en unas horas tienen que realizar una obra capaz de destacar y atraer el interés del jurado. Aunque a primera vista la rapidez no sea el adjetivo que mejor describa estos concursos –los artistas emplean su tiempo en elegir las pinceladas- el verdadero reto se libra en cada participante, buscar la originalidad en un monumento que muchos antes ya pintaron antes que tú.
Estos eventos no solamente decoran una ciudad, no solamente transforman una tarde de domingo corriente en una escena pintoresca y festiva, no solamente entretienen a visitantes y oriundos. Los concursos de pintura rápida, de alguna forma avivan la llama del arte –esa que cada vez ilumina con menos fuerza-, recuerda a artistas, organizadores y transeúntes que las artes plásticas es una forma de expresión apabullante, que todavía nos queda imaginación, que podemos plasmarla con nuestras propias manos, que podemos comunicarnos de otro modo que no sea un Smartphone. Que a veces, ver un cuadro, también es emocionante. Por un día, el arte es importante. Hasta el siguiente concurso.
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